El Mito de la Democracia Occidental
Por Paul
Craig Roberts 17-Dic-18
FUENTE:
https://www.globalresearch.ca/the-myth-of-western-democracy/5663189
El texto [en rojo] NO aparece en el original y fue agregado por
el equipo de traducción.
¿Cómo se las arregla
Occidente con su pretensión de ser una alianza de grandes democracias en las
que el gobierno es el servidor del pueblo?
En
ninguna parte del Oeste, excepto posiblemente Hungría y Austria, el gobierno
sirve a la gente.
¿A
quién sirven los gobiernos occidentales? Washington sirve a Israel, al complejo
militar/de seguridad, a Wall Street, a los grandes bancos y a las corporaciones
de combustibles fósiles.
La
totalidad del resto del Oeste sirve a Washington.
En ningún lugar del Oeste cuenta la gente. La clase obrera
estadounidense, traicionada por los demócratas [Nixon,
que estableció relaciones con China antes de comenzar a enviar las fábricas
allá, era republicano] que enviaron sus empleos a Asia, eligió a Donald
Trump [justo ése era el truco; no importa a quién se
elija: «cara, gana la
élite; cruz, pierde el pueblo»] y el
pueblo estadounidense fue descartado rápidamente por la candidata demócrata
Hillary Clinton como "los deplorables de Trump".
Los demócratas, al igual que los republicanos, sirven al
poder, no al pueblo.
En Europa vemos el aplastamiento de la democracia en todas
partes.
La primer ministro británica, May, ha convertido el Brexit
en una sumisión a la UE. Ella ha traicionado a los británicos [fue colocada como un control de daños, después de todo, ella
se oponía al Brexit] y aún no ha sido colgada de un poste de luz, lo que
demuestra cuánto los británicos aceptan la traición [no
muy diferente de los griegos con Tsipras, ¿verdad?]. Los británicos han
aprendido que no cuentan. Son como una nada.
Los griegos votaron por un gobierno de izquierda que
prometió protegerlos de la UE, del FMI y de los grandes bancos, pero los vendió
rápidamente con [peores] acuerdos de austeridad
que destruyeron lo que quedaba de la soberanía y del nivel de vida griegos. Hoy
la UE ha reducido a Grecia a un país del tercer mundo.
Los franceses han estado en la revuelta de las calles
durante semanas contra el presidente francés que sirve a todos, excepto al
pueblo francés.
Actualmente hay protestas masivas en Bruselas, Bélgica, con
la mitad del gobierno también renunciando en protesta contra el gobierno que
firma un pacto que reemplazará al pueblo belga con inmigrantes de África, Medio
Oriente y Asia. Los gobiernos corruptos y despreciables que firmaron este pacto
representan a los extranjeros y al dinero de George Soros, no a sus propios
ciudadanos.
¿Por qué los ciudadanos son tan impotentes que sus gobiernos
pueden elevar el interés de los extranjeros muy por encima de los intereses de
los ciudadanos? [no se trata del interés de los
extranjeros; éstos son simple carne de cañón para lanzar contra los
ciudadanos].
Hay un montón de razones. La principal es que las personas
están desarmadas y son convencidas mediante la propaganda de aceptar la
violencia del Estado contra ellas, pero no de devolver violencia contra el uso
ilegal de la fuerza por los gobiernos contra los ciudadanos.
En resumen, hasta que los pueblos conquistados de Europa
maten a la policía, que sirve a la élite gobernante y que se deleita en
infligir brutalidad contra aquellos cuyos impuestos pagan sus salarios, toman
las armas de la policía y matan a los políticos corruptos que los han vendido,
los pueblos de Europa seguirán siendo pueblos conquistados y oprimidos.
En algún momento pasado, Chris Hedges, uno de los
periodistas reales que quedaban, dejó en claro que, sin una revolución
violenta, extirpar el tumor de la superioridad del gobierno sobre la gente, la
libertad en todo Occidente está totalmente muerta.
La pregunta que tenemos ante nosotros es si los pueblos
occidentales están demasiado lavados de cerebro, demasiado encerrados en La
Matrix, tan exhaustos para levantarse y defender su libertad. La resistencia
está ocurriendo en Francia y Bélgica, pero el gobierno que vendió a Grecia no
ha sido colgado de los postes de luz. Los estadounidenses están tan lavados del
cerebro que creen que Rusia, China, Irán, Siria, Corea del Norte y Venezuela
son sus enemigos cuando está perfectamente claro que su enemigo es
"su" gobierno en Washington.
A excepción de mis lectores estadounidenses, los
estadounidenses están encerrados en La Matrix. Y matarán para permanecer en ella,
donde las explicaciones controladas son tranquilizadoras. Cualquiera que busque
liderazgo en Washington es un idiota.
Washington es un maestro de la propaganda [allí se inventó; recuérdese a Edward Bernays, asesor de
Woodrow Wilson antes de la 1GM]. La propaganda de Washington incluso ha
infectado al gobierno ruso, que en todos los informes cree estúpidamente que el
acuerdo con Washington es el secreto que hará que Rusia tenga éxito.
Es un gobierno tonto [estimado Paul,
creer que todo mundo es tonto menos uno, es un tipo de pentontez casi
incurable; no es lo mismo torear, que ver los toros desde la barrera. Hasta
ahora, Putin no ha pescado ninguno de los curricanes que le han lanzado para
ver si se gancha; recordemos el derribo del avión ruso por Turquía, ¿qué
resultó en el mediano plazo? En otras palabras, la realidad no es un asunto de
blanco y negro, tiene muchísimas tonalidades de gris] que confía en los acuerdos
con Washington.
Todo se reduce a esto: Si la aceptación de las provocaciones
evita la guerra, esa es la política correcta, pero si la aceptación de las
provocaciones fomenta más provocaciones hasta que la guerra resulta inevitable,
entonces una respuesta más firme a las provocaciones es la política correcta.
Una respuesta más firme introduce cautela en el proceso, mientras que la
aceptación de provocaciones alienta al agresor.
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