China Revolucionará el Mundo: De Agricultores e Inteligencia Artificial
Por Marc
Vandepitte & Ng Sauw Tjhoi 11-Oct-19
FUENTE:
https://www.globalresearch.ca/china-farmers-artificial-intelligence/5691635
El texto [en
rojo] NO viene en el original y fue agregado por el equipo de traducción.
Por primera
vez en la historia reciente, un país pobre y subdesarrollado en poco tiempo se
ha convertido en una superpotencia económica, con un gran impacto en los
asuntos mundiales. ¿Cómo ha sido posible? ¿Qué significa esto para el resto del
mundo? Una retrospectiva de 70 años de revoluciones chinas.
De vuelta en el mapa mundial
Durante siglos, China ejerció una atracción cultural y fue,
junto con India, un jugador líder en el escenario mundial. Después de un siglo
de desgarradora colonización, humillación y guerras civiles internas, Mao
Zedong volvió a colocar a su país en el mapa mundial en 1949. Los chinos
recuperaron su dignidad [es dudoso que la hayan
recuperado con el Gran Salto Adelante y la Revolución Cultural, ambas
impulsadas por Mao; si acaso, la empezaron a recuperar con Deng, quien al
parecer se inspiró en Lee Kwan Yew, de Singapur].
Fue el comienzo de un "maratón de desarrollo a paso
veloz" que conmocionaría las relaciones mundiales. Y como predijo Napoleón
Bonaparte:
“China es un gigante dormido. Cuando
despierte, el mundo entero temblará ".
Milagro económico
Al momento del establecimiento de la República Popular de
China en 1949, el país era uno de los más pobres y atrasados del mundo. La
gran mayoría de los chinos estaban empleados en la agricultura (a menudo
primitiva). El PIB per cápita era la mitad del de África y una sexta parte del de
América Latina. Para dar una oportunidad a los ideales revolucionarios de
igualdad en un entorno mundial altamente hostil, era necesario lograr un rápido
crecimiento económico y tecnológico. Esto se llevaría a cabo en los próximos 70
años a través de un proceso de prueba y error.
Después de un período extremadamente introvertido y
turbulento bajo Mao Zedong, en el que se lanzaron controvertidas campañas
masivas como 'El Gran Salto Adelante' y 'La Revolución Cultural', Deng Xiaoping
tomó la antorcha en 1978. Casi inmediatamente, pero con cautela, lanzó reformas
económicas y estableció relaciones con numerosos países, incluidos,
notablemente, USA.
En
comparación con Europa occidental, la industrialización de China fue cuatro
veces más rápida y con una población cinco veces mayor [i]. Hace setenta años,
la economía china era insignificante a nivel mundial. En 2014, los chinos
superaron a USA como la mayor economía (en términos de volumen) y también se
convirtió en el mayor país exportador. Hoy hay 35 ciudades chinas con un PIB
igual al de países como Noruega, Suiza o Angola. Mientras tanto, el PIB chino
se ha vuelto más grande que el PIB combinado de 154 países. En 2011-2012, China
produjo más cemento que USA durante todo el siglo XX. Construyó diez nuevos aeropuertos
cada año y tiene la red de autopistas y líneas de trenes de alta velocidad más
extensa del mundo. En la actualidad, el país exporta tanto en seis horas como lo
hizo en todo el año 1978.
Salto tecnológico hacia adelante
China no solo es sorprendente en términos de evolución
cuantitativa. En términos de calidad, la economía china también ha dado grandes
pasos adelante, siendo el desarrollo tecnológico el mejor ejemplo. Millones de
ingenieros, científicos y técnicos se han graduado de universidades chinas en
las últimas décadas. Hasta hace poco, China era vista como un imitador de la
tecnología. Hoy es un innovador líder. Actualmente, China tiene la
supercomputadora más rápida y está construyendo el centro de investigación más
avanzado del mundo para desarrollar computadoras cuánticas aún más rápidas. En
los últimos años, el país ha logrado resultados impresionantes en el campo de
los cohetes hipersónicos, las pruebas de procesamiento de genes humanos, los
satélites cuánticos y quizás lo más importante: la inteligencia artificial. El
proyecto Made in China 2025 tiene como objetivo fortalecer esa innovación
tecnológica en sectores socioeconómicos vitales.
¿China debe parte de su progreso tecnológico al robo de
propiedad intelectual? Sin duda, como es el caso de países como Brasil, India y
México. En el pasado, USA también ha podido desarrollar su crecimiento
económico a nivel de superpotencia solo gracias al robo de tecnología en gran
escala de Gran Bretaña y Europa. Como dice The Economist:
"La transferencia de conocimientos
de los países ricos a los más pobres, por las buenas o por las malas, es una
parte integral del desarrollo económico".
Receta
El éxito del aceleramiento en la modernización china se basa
en varios pilares:
1.
Los sectores clave de la economía están en manos
del gobierno, que también controla indirectamente la mayoría de los otros
sectores, entre otras cosas mediante la presencia controladora del Partido
Comunista en la mayoría de las empresas medianas y grandes.
2.
El sector financiero está bajo estricto control
gubernamental.
3.
La economía está planificada, no en todos los
detalles, sino en general, tanto a corto como a largo plazo.
4.
Hay espacio para (bastante) iniciativa privada
dentro de un mecanismo de mercado bien delineado que se desarrolla
dinámicamente en varios dominios económicos; El mecanismo de mercado se tolera
siempre que no interfiera con los objetivos económicos y sociales (de la
planificación general).
5.
En comparación con otros países emergentes,
existe un alto grado de apertura a la inversión extranjera y al comercio
exterior, siempre que esté en línea con los objetivos económicos globales de
China.
6.
Se está haciendo un gran esfuerzo para
desarrollar la infraestructura y la Investigación y Desarrollo.
7.
Los salarios siguen en gran medida el aumento de
la productividad, que ha creado un mercado interno amplio y dinámico.
8.
Se invierte una cantidad relativamente grande en
educación, atención médica y seguridad social.
9.
El país ha disfrutado de paz durante décadas y
existe un nivel relativamente alto de paz social en el lugar de trabajo.
§
La distribución de tierras agrícolas a los
agricultores al comienzo de la revolución y el sistema de registro individual
de hogares (Hukou) han hecho relativamente posible evitar el típico éxodo rural
caótico de la mayoría de los países del Tercer Mundo, lo que resulta en un
trabajo masivo informal e improductivo.
§
A diferencia de la Unión Soviética, China no se
ha embarcado en una carrera armamentista muy costosa con USA.
Este enfoque
contrasta con la receta de los países capitalistas donde el capital financiero
y las multinacionales están a cargo, donde las ganancias a corto plazo son el
objetivo primordial y donde los gobiernos están obsesionados con eliminar los
déficits presupuestarios a través de ahorros. La forma espectacular en que han
abordado la crisis financiera (2008) es típica de China. El gobierno chino
lanzó un programa de estímulo del 12,5% del PIB, probablemente el mayor
programa de tiempo de paz en la historia. La economía china se desplomó un
poco, pero luego se recuperó rápidamente, mientras que la economía europea ha
estado tambaleándose durante diez años.
Nuevo modelo de crecimiento
Debido a los rápidos cambios en el mercado laboral interno,
los salarios y los mercados extranjeros, el gobierno chino desarrolló un modelo
de crecimiento diferente. Cuando el presidente Xi Jinping asumió el cargo en
2012, declaró que "el crecimiento por el bien del crecimiento" ya no
debería ser el objetivo. El viejo modelo se basaba en las exportaciones y en
las inversiones en la industria pesada, la construcción y la industria
manufacturera. En el nuevo modelo, la fuerza impulsora es el consumo masivo
(mercado interno), el sector de servicios y las actividades de mayor valor
agregado al ascender en la escala tecnológica. Esta transformación ilustra la
flexibilidad con la que el liderazgo chino implementa la política económica. Es
el 12° pilar de la receta china. Esta flexibilidad se destaca de la forma en
que la Unión Soviética enfrentó estos desafíos en su período final.
¿Puede el
crecimiento exitoso continuar por un tiempo? Sin duda, la economía está
luchando con un alto nivel de deuda, bancos en la sombra, una inversión
excesiva en infraestructura, una burbuja inmobiliaria, una población que
envejece, una creciente guerra comercial con USA, etc. Sin embargo, la mayoría
de los observadores todavía ven a China como una economía fuerte con análisis
que muestran que todavía hay mucho margen para errores y contratiempos y mucho
espacio para crecer a un ritmo rápido durante mucho tiempo.
La mayor reducción de la pobreza en la historia del mundo.
En 1949, al comienzo de la revolución china, la esperanza de
vida era de 35 años. Treinta años después, ya se había duplicado a 68 años [ii].
Hoy, la esperanza de vida de los chinos es de 76 años. La mortalidad infantil
ha mejorado bastante bien. Si, por ejemplo, India ofreciera la misma atención
médica y apoyo social a sus habitantes que China, 830,000 bebés indios menos
morirían cada año [iii].
Entre 1978 y 2018, China logró sacar a un número récord de
personas de la pobreza: 770 millones. Esto equivale a la población total del
África subsahariana durante ese período. Al ritmo actual, la pobreza extrema
será erradicada para 2020. Según Robert Zoellick, ex presidente del Banco
Mundial,
Este es “sin
duda el mayor salto para superar la pobreza en la historia. Los esfuerzos de
China por sí solos han asegurado que se cumpla el Objetivo de Desarrollo del
Milenio para la reducción de la pobreza. Nosotros y el mundo tenemos mucho que
aprender de esto”.
Mientras los salarios están estancándose o disminuyendo en
muchos países, durante la última década se han triplicado en China. Hace quince
años, las multinacionales occidentales acudieron en masa a China debido a los
bajos salarios. El movimiento inverso ahora está comenzando a afianzarse. Los
salarios promedio en la industria china son actualmente solo un 20% más bajos
que en Portugal. Países como Bulgaria, Macedonia, Rumania, Moldavia y Ucrania
ya tenían salarios mínimos más bajos en 2013 que en China.
Lados oscuros
Esta
historia de éxito también tiene sus inconvenientes. El aumento más rápido de la
productividad en la industria y los servicios, en comparación con la
agricultura, ha llevado a una gran brecha entre las zonas urbanas y rurales,
entre las regiones más pobres y las provincias costeras orientales más ricas.
El estricto sistema Hukou (registro de la residencia individual, determina la
posición social) provoca un enorme grupo (de cientos de millones) de
"migrantes internos" que tienen menos derechos sociales y a menudo
son discriminados. La política del hijo único (desde 1978) ha llevado, además
de su carácter vinculante, a numerosos abortos selectivos y un superávit
masculino de más de treinta millones.
Democracia: entrada y salida
El sistema político occidental
generalmente se considera superior y se considera el único modelo válido. Esto
no demuestra mucho conocimiento histórico sabiendo que casi todos los regímenes
fascistas nacieron en el seno de la democracia parlamentaria occidental. Un
observador imparcial también observará que la democracia occidental sirve
principalmente a los intereses del 1%. Que carece tanto de una visión a largo plazo
[La democracia carece de esa visión, pero no sus
manejadores; que tienen siglos jugándole el dedo en la boca a todos los demás.
Ya lo dijo Joseph Stiglitz: «Gobierno del 1%, por el 1%, para el 1%»… con cargo al 99%. Con
frecuencia la democracia resulta en una guerra civil legalizada de baja
intensidad y recurrente cada período electoral] como
de una política eficaz para abordar los problemas sociales y ecológicos. Y que
ha sido el caldo de cultivo para figuras cada vez más ridículas, impredecibles
y peligrosas [pero sobre todo, manipulables]
como Trump, Johnson, Bolsonaro y Duterte [y un largo
etc y uno se pregunta si ¿eso es “lo mejorcito” que pueden ofrecer los
partidos? y luego se extrañan del abstencionismo].
Cuando se trata de democracia,
el énfasis en Occidente está en el lado de los insumos, en la cuestión de cómo
y por quién toma la decisión. ¿Cuáles son los procedimientos para elegir el
liderazgo político y es la voluntad de los ciudadanos expresada por los
representantes elegidos? Las elecciones son el elemento más importante en esto.
En China, el
énfasis está en el lado de la producción, es decir, en las consecuencias de la
decisión: ¿la decisión es exitosa y quién se beneficia? El resultado es
primordial, la buena y justa gobernanza es el criterio más importante [iv]. A
este respecto, los chinos otorgan más importancia a la calidad de sus políticos
que a los procedimientos para elegir a sus líderes.
Toma de decisiones políticas con características chinas.
Según Daniel Bell, experto en el
modelo chino, el sistema político de China es una combinación de meritocracia
en la cima, democracia en la base y espacio para la experimentación en los
niveles intermedios. Los líderes políticos son seleccionados en función de sus
méritos y, antes de llegar a la cima, pasan por un severo proceso de
capacitación, práctica y evaluación. Hay elecciones directas a nivel municipal
y para los congresos provinciales del partido. Las innovaciones políticas,
sociales o económicas se prueban primero en una escala más pequeña (algunas
ciudades o provincias) y luego de una evaluación exhaustiva y se introducen
ajustes a gran escala [v]. Según Daniel Bell, esa combinación "se acerca a
la mejor fórmula para gobernar un país grande ".
Además, el gobierno central
organiza encuestas de opinión de manera muy regular que evalúan el desempeño
del gobierno en las áreas de seguridad social, salud pública, empleo y medio
ambiente. La popularidad de los líderes locales también es el tema de las
encuestas. En base a esto, las políticas se ajustan con frecuencia.
El sistema de toma de decisiones
chino ha demostrado su valía. Francis Fukuyama, de quien difícilmente se pueden
sospechar simpatías izquierdistas o chinas:
“La fortaleza más importante del
sistema político chino es su capacidad para tomar decisiones grandes y
complejas rápidamente, y tomarlas relativamente bien, al menos en política
económica. China se adapta rápidamente, toma decisiones difíciles y las
implementa de manera efectiva".
Por ejemplo, en solo dos años,
China ha extendido el sistema de pensiones a 240 millones de residentes
rurales, lo que excede drásticamente el número total de personas cubiertas por
el sistema estatal de pensiones de USA.
Por lo
tanto, no debería sorprendernos que el gobierno chino pueda contar con un gran
apoyo de la población. Alrededor del 90% dice que su país está dirigiéndose en
la dirección correcta. En Europa occidental, eso está entre 12% y 37% (el
promedio mundial).
El partido comunista
La columna vertebral del modelo
chino es el Partido Comunista. Con más de 90 millones de miembros, es, con
mucho, la organización política más grande del mundo. Las proporciones
gigantescas del país demuestran que esa columna vertebral es útil o incluso
necesaria. China es del tamaño de un continente: es 17 veces más grande que
Francia y tiene tantos habitantes como Europa Occidental, Europa del Este, los
países árabes, Rusia y Asia Central combinados. Traducir esto a la situación
europea significaría que Egipto o Kirguistán tendrían que ser gobernados desde
Bruselas. Dadas estas proporciones, las grandes diferencias entre las regiones
y los desafíos que enfrenta el país, se necesita una fuerte fuerza cohesiva
para mantener gobernable al país y poder implementar una política sólida. De
acuerdo a The Economist:
"Los gobernantes de China creen que el país no
puede mantenerse junto sin el gobierno
de un partido único, tan firme como el de un emperador (y puede que tengan
razón)".
El partido recluta a las
personas más hábiles. El proceso de selección para la promoción de los
principales líderes es objetivo y riguroso. Kishore Mahbubani, alto experto en
Asia:
"Lejos de ser un sistema dictatorial arbitrario,
el PCCh pudo haber logrado crear un sistema sujeto a reglas que es fuerte y
duradero, no frágil y vulnerable. Aún más impresionante, este sistema vinculado
a las reglas ha producido posiblemente el mejor conjunto de líderes que China
podría generar".
Casi las
tres cuartas partes de la población dicen que apoyan el sistema de partido
único.
Relaciones internacionales
La economía
de China ha sido en gran medida autosuficiente en el pasado. Ha podido
permitirse el lujo de vivir aisladamente del mundo exterior y a menudo lo ha
hecho así. Incluso en el apogeo de su poder imperial, China ha extendido su
cultura mediante relaciones diplomáticas y económicas más bien que por
conquistas (militares) [vi]. Esta forma de política exterior también ha sido
mantenida en la historia reciente. China se esfuerza por un mundo multipolar.
Parece que la soberanía es la piedra angular del orden internacional y rechaza
cualquier interferencia en los asuntos internos de otro país, por cualquier
razón. Esto a menudo le genera a China el reproche de que hace muy poco contra
las violaciones de los derechos humanos en otros países. En cualquier caso,
China es el único miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU que no
ha disparado un tiro fuera de sus propias fronteras en los últimos 30 años.
Globalización al estilo chino
Hoy, China ya no es
autosuficiente. Con el 18% de la población mundial, tiene solo el 7% de las
tierras de cultivo arables del mundo, y solo importa el 5% del petróleo
mundial. Además, el país produce mucho más de lo que consume. Por todas estas
razones, China hoy depende en gran medida de los mercados mundiales.
La dependencia de China del
comercio mundial y, en esencia, el "cerco" militar de USA (ver más
abajo) ha impulsado al país a tomar la iniciativa para una Nueva Ruta de la
Seda. Hace dos mil años, durante la dinastía Han, la mundialmente conocida Ruta
de la Seda conectaba a China con el Mar Mediterráneo a través de Eurasia. Al
igual que la ruta comercial histórica, el proyecto se ha convertido hoy en una
vasta red de rutas marítimas y terrestres, lanzado en 2013 bajo el nombre de
‘Una Región, Un Camino'.
Mientras tanto, más de 1,600
proyectos están involucrados en obras de construcción e infraestructura,
proyectos de transporte, aeropuertos y otros puertos, pero también en
iniciativas de intercambio cultural. Cientos de inversiones, préstamos, acuerdos
comerciales y zonas económicas especiales, por valor de 900,000 mdd, se
distribuyen en 72 países, lo que representa una población de aproximadamente 5
mil millones de personas o el 65% de la población mundial. 'Una Región, Un
Camino' es el mayor programa de desarrollo desde el Plan Marshall para la
reconstrucción de Europa luego de la 2GM.
Martin
Jacques describe la Nueva Ruta de la Seda como "Globalización al estilo
chino". La iniciativa ''Una Región, Un Camino' recuerda mucho la estrategia
comercial de los Países Bajos hace 400 años. El colonialismo británico y
francés estaba literalmente a la caza de tierras conquistadas. Organizaron
conquistas militares para someter a las sociedades y robar la riqueza.
Amsterdam, por otro lado, luchaba por un ‘imperio de comercio y crédito’. No se
trataba de territorios sino de negocios. Los holandeses construyeron una flota
gigantesca, instalaron puestos comerciales en las principales rutas y luego
trataron de asegurarlos. Al igual que los holandeses en el siglo XVII, China
tiene actualmente la mayor flota mercante [vii]. Las Zonas Económicas
Especiales son "guarniciones comerciales de un mundo de cadenas de
suministro, permitiendo a China asegurar los recursos sin la complicada política
de subyugación colonial", dice Stratfor, un prestigioso grupo de expertos.
Tendencia de las relaciones Norte-Sur
El enorme crecimiento de China
en el corazón de Asia ha actuado como catalizador para todo el continente. El
centro de gravedad económico mundial está cambiando rápidamente hacia las
economías más pobres de Asia. También aumenta drásticamente la demanda de
materias primas, en beneficio de muchos países de América Latina y África.
La
industrialización de Asia Oriental muestra el patrón de "gansos
voladores". A medida que un país mejora económicamente, los salarios
aumentan y las tareas de producción menos sofisticadas cambian a regiones más
pobres con menores costos laborales. Esto sucedió primero en Japón, luego en
Corea del Sur y Taiwán, y hoy este proceso está en pleno apogeo en China.
Debido a los salarios más altos, las compañías chinas ahora están reubicando su
producción a países como Vietnam y Bangladesh, pero también cada vez más a
África. Si esta tendencia continúa, puede ayudar a construir una base
industrial en el continente africano.
Enfrentando a USA
Las revoluciones socialistas no
estallaron en el corazón del capitalismo sino en sus eslabones más débiles, los
países más pobres y subdesarrollados. Luego, un sistema social avanzado tuvo
que construirse sobre una base material débil, lo que ha dado lugar a muchas
desventajas y contradicciones. Setenta años después, esa situación ha cambiado
radicalmente. El gran avance de China en tecnología y su espectacular
crecimiento económico han sentado bases sólidas para construir una sociedad
socialista.
Por supuesto, a Washington no le
divierte esto. Pero aún peor es el hecho de que China amenaza con superar
económicamente a USA. Estos dos fenómenos alimentan la "nueva Guerra
Fría" entre USA y China y la amenaza de una "guerra caliente".
Enel contexto de las discusiones sobre el presupuesto de 2019, el Congreso declaró que "la competencia estratégica a largo plazo con China es una prioridad principal para USA". No se trata solo de aspectos económicos, sino de una estrategia general que debe llevarse a cabo en varios frentes. El objetivo es mantener el dominio en tres áreas: tecnología, industrias del futuro y armamentos.
Trump apunta a un
restablecimiento completo de las relaciones económicas entre USA y China. La
creciente guerra comercial es la más llamativa, pero es solo la vanguardia de
una estrategia más amplia que incluye la inversión, tanto la inversión china en
USA como la inversión estadounidense en China. En primer lugar, los sectores
estratégicos están dirigidos con el objetivo de interrumpir el avance
tecnológico de China. A este respecto, el despliegue de la red 5G es crucial.
No es casualidad que Huawei, que está muy por delante en el desarrollo de la
tecnología 5G, se haya convertido en un objetivo central.
El gobierno
de Trump también está tratando de extender esta guerra económica con China a
otros países mediante la firma de cláusulas en los acuerdos comerciales o
simplemente presionándolos. El objetivo es crear una especie de "cortina
de hierro económica" en todo el país.
Estrategia militar estadounidense
La estrategia militar hacia
China tiene dos vías: una carrera armamentista y un cerco al país. [viii] La
carrera armamentista está en pleno apogeo. USA gasta 650,000 mdd/año en armas,
o más de un tercio del total mundial. Eso es 2.6 veces más que China y 11 veces
más que per cápita. También gasta 150,000 mdd/año en investigación militar,
cinco veces más que China. El Pentágono está trabajando febrilmente en una
nueva generación de armas altamente sofisticadas, drones y todo tipo de robots,
al que un futuro enemigo no podrá hacer frente. No se excluye una guerra
preventiva.
La segunda vía es el cerco
militar. Para su comercio exterior, China depende en un 90% del transporte
marítimo. Más del 80% del suministro de petróleo tiene que pasar por el
Estrecho de Malaca (cerca de Singapur), donde USA tiene una base militar.
Washington puede cortar fácilmente los flujos de petróleo a China. Actualmente
el país no tiene defensa contra él. Alrededor de China, USA tiene más de
treinta bases militares, instalaciones o centros de entrenamiento (puntos en el
mapa). El 60% del total de la flota estadounidense está estacionado en la
región. No es exagerado decir que China está rodeada y oprimida. No se puede
imaginar lo que sucedería si China instalara incluso una instalación militar, y
mucho menos una base, cerca de USA.
[¿Una base de USA en Vietnam?]
Es en este
contexto que se debe ver la militarización de China de pequeñas islas en el Mar
del Sur de China, así como su reclamo de una gran parte de esta área marítima.
Controlar las rutas de envío a lo largo de las cuales se transportan sus
productos energéticos e industriales es de vital importancia para Beijing. Es
en ese mismo contexto que se debe ver la Nueva Ruta de la Seda.
Campeón de la contaminación y la ecologización
Desde finales de la década de
1980, China ha entrado en una fase de desarrollo que ha causado una gran
contaminación ambiental. Como el "taller del mundo", es uno de los
mayores contaminadores del planeta. En la actualidad, el país también es —con mucho— el mayor emisor de CO2, aunque las emisiones por persona son
menos de la mitad de las de USA. Y aproximadamente del mismo tamaño que las de
Europa. China también es responsable de solo el 11% de las emisiones
acumuladas, en comparación con más del 70% de los países industrializados.
La situación es insostenible. Al
ritmo actual, entre 1990 y 2050, China habrá producido tanto dióxido de carbono
como lo hizo todo el mundo entre el comienzo de la Revolución Industrial y
1970, y eso es catastrófico para el calentamiento global.
Hace diez años, el liderazgo
chino cambió de rumbo y los problemas ecológicos recibieron alta prioridad. En
2014, el Primer Ministro Li Keqiang declaró la "Guerra contra la
Contaminación". Se está elaborando una batería de medidas, incluida una
legislación sobre el medio ambiente que marca tendencias, pero su aplicación no
siempre es evidente.
Los resultados siguen
rápidamente. En poco tiempo, China se ha convertido en el N° 1 en el campo de
los paneles solares y la energía eólica. Actualmente, el 33% de la electricidad
es generada por energía verde, en comparación con menos del 17% en los USA. Hoy
China invierte casi tanto en tecnología verde como el resto del mundo
combinado. Quiere capturar y almacenar millones de toneladas de CO2 bajo tierra
en un futuro próximo.
El país es
pionero en la transmisión a larga distancia de grandes cantidades de energía
(por ejemplo, desde campos distantes de paneles solares), lo cual es muy
importante para el suministro de energía verde de las ciudades. Según datos de
la NASA, los esfuerzos sostenidos de reforestación de China han hecho una
contribución importante a la forestación global, que es esencial para mantener
las emisiones bajo control. Por otro lado, las empresas chinas todavía tienen
una gran parte en la tala ilegal en todo el mundo.
Santa Patrona del Acuerdo Climático de París
China se llama la santa patrona
del Acuerdo Climático de París ‘(COP 21, 2015, enfoque: limitar el
calentamiento global a un máximo de 2° grados, con 1,5 grados como valor
objetivo). Cuando Trump se retiró del acuerdo en 2017, Beijing declaró que
haría todo lo que estuviera en su poder para lograr los objetivos de la COP21,
junto con otros, incluida la UE.
China también actúa como
mediador entre los países industrializados ricos y los países en desarrollo,
enfatizando que el calentamiento global es esencialmente una responsabilidad
histórica de los países industrializados y, por lo tanto, argumentando que los
países ricos deberían poner a disposición de los países en desarrollo recursos
financieros y tecnología para combatir el cambio climático. . Gracias a China,
la gran mayoría de los países en desarrollo se han alineado con los objetivos de
la COP21 y han presentado planes climáticos a la Asamblea General de las
Naciones Unidas en los últimos meses.
Obviamente,
todavía hay un largo camino por recorrer en China, pero va en la dirección
correcta. Testigo de esto es el informe a mediados de 2017 de que China ha
logrado sus objetivos climáticos dos años antes de la fecha acordada de 2020.
China es
Errores
Se han cometido muchos errores
en los últimos setenta años. Inicialmente, el PCCh intentó introducir el
socialismo a toda prisa con el Gran Salto Adelante (1958-1961), con
consecuencias catastróficas. El extremismo de izquierda de la Revolución
Cultural (1966-1976) dejó profundas cicatrices y condujo a una reacción de
derecha. La introducción de elementos del mercado a partir de 1978 ha dado rienda
controlada a la explotación capitalista. Las consecuencias fueron de largo
alcance: una brecha más profunda entre ricos y pobres, y la creación de una
capa superior de capitalistas.
El margen para el
enriquecimiento personal se ha ampliado y ha causado una corrupción
desenfrenada y abuso de poder. Sin embargo, esta política de "pájaro
capitalista en la jaula" ha hecho que la economía china crezca
espectacularmente y ha reducido drásticamente la pobreza extrema. El futuro
determinará si esta dinámica controlada orientada al mercado puede mantenerse
bajo control.
El liderazgo chino ha logrado
mantener unido al vasto y muy heterogéneo país, pero esto se hizo y se hace
manteniendo a ciertas minorías estrictamente alineadas. Los tibetanos y los
uigures se sienten tratados como ciudadanos de segunda clase, a pesar de que
las autoridades chinas han realizado muchos esfuerzos formales para mejorar su
situación. Quedan muchas preguntas sobre el enfoque poco ortodoxo y de fuerza en
las tensiones étnicas.
Una ventaja
aquí es que el liderazgo chino no tiene la costumbre de ocultar u disfrazar
debilidades y problemas. Por lo general, se reconocen y abordan explícitamente.
Por ejemplo, antes y durante el XVIII Congreso, los principales problemas del
país se enumeraron uno por uno y se discutieron y tradujeron cada uno con los
puntos de acción asignados. Tal actitud política racional hace posible aprender
de los errores y, si es necesario, ajustar el rumbo.
Estabilidad del planeta.
Por primera vez en la historia
reciente, un país pobre y subdesarrollado se ha convertido rápidamente en una
superpotencia económica, con un gran impacto en los asuntos mundiales. China, y
tras ella India, está cambiando rápidamente el equilibrio de poderes y
transformando el mundo de una manera sin precedentes.
Cuanto más China sigue un curso
independiente, más se desvía de Occidente y más sostiene un espejo hacia el
"sistema occidental", más se le critica y ataca. Parece muy difícil
para nosotros mirar a este nuevo jugador mundial de manera abierta. Según
Mahbubani, "la reticencia de los líderes occidentales a reconocer que la
dominación del mundo occidental no puede continuar es una gran amenaza".
[ix]
Sin embargo, tendremos que
aprender a vivir con la conciencia de que ya no somos el centro y el punto de
referencia del mundo. De hecho, con el auge del populismo en más y más países,
personas impredecibles e irresponsables como Trump, Bolsonaro o Johnson están
tomando las riendas [con una salvedad; estas personas
“impredecibles e irresponsables”, no se mandan solos. Fueron puestas allí por «los de siempre»]. La
estabilidad y la capacidad de vida de este planeta dependerán cada vez más de
personas como Xi Jinping y otros líderes decentes.
Notes
[i] Tomamos 1870 como
punto de partida para Europa Occiddental y 1980 para China. Medimos la rapidez
del proceso de industrialización basado en el crecimiento del PIB per cápita. Las
cifras están calculadas sobre la base de Maddison A., Ontwikkelingsfasen van
het kapitalisme, Utrecht 1982, p. 20-21 en UNDP, Human Development Report
2005,p. 233 en 267. Zie ook The Economist, 5 januari 2013, p. 48.
[ii] Hobsbawm E.,
Een eeuw van uitersten. De twintigste eeuw 1914-1991, Utrecht 1994, p. 540.
[iii] Calculado
sobre la base de UNICEF, La Situación de los Niños del Mundo 2017, New York, p.
154-155.
[iv] Para la
distinción entre insumo y resultado de la toma de decisiones políticas, véase
Kruithof J., Links en Rechts. Kritische opstellen over politiek en kultuur,
Berchem 1983, p. 66.
[v] Bell D., El
Modelo Chino. Meritocracia Política y los Límites de la Democracia, Princeton
2015, p. 179-188.
[vi] Luce E., La
Retirada del Liberalismo Occidental, New York 2017, p. 166.
[vii] En el siglo
17, los Países Bajos tenían 25 veces más barcos que Inglaterra, Francia y Alemania.
Hoy, China tiene 20 veces más barcos mercantes que USA. Maddison A., La
Economía Mundial. Una Perspectiva Milenial, OESO 2001, p. 78; Khanna P., Úselo
o Piérdalo: La Gran Estrategia China, Stratfor,9 april 2016.
[viii] Para un
tratamiento más extenso, véase Vandepitte M., Trump y China: ¿Hacia una Guerra
Fría o Caliente?
[ix] Mahbubani
K., De eeuw van Azië. Een onafwendbare mondiale machtsverschuiving, Amsterdam
2009, p. 18.
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