jueves, 16 de enero de 2020

Más sobre el Control de Daños


Los ‘Documentos de Afganistán’ —Administración de la  Narrativa por el Estado Profundo

Seamos honestos, la mayoría de las modernas “filtraciones” no hacen sino apoyar a la clase dirigente
Por Kit Knightly                                                                                          15-Dic-19
FUENTE: https://off-guardian.org/2019/12/15/the-afghanistan-papers-deep-state-narrative-management


El texto [en rojo] NO viene en el original y fue agregado por el equipo de traducción. Igualmente, lo destacado en amarillo aparece como texto simple en el original.
La Gran Revelación para el Washington Post esta semana es la publicación de los Documentos de Afganistán. Una serie de entrevistas y documentos "compilados en secreto" y luego materia de un "desafío legal" del gobierno de USA.
WaPo lo llama sin rodeos: ”Una historia secreta de la guerra".
Pero aquí no hay nada realmente secreto, y muy poca historia real. ¿Qué nos dicen? Absolutamente nada, excepto lo que se supone que debemos creer.
Una gran cantidad de modernas "filtraciones" no lo son en absoluto. Son ejercicios orwellianos para controlar la discusión [la moda la inauguró Wikileaks, con sus filtraciones “políticamente correctas”; tan correctas, que rápidamente perdieron credibilidad]. Y ésta no es la excepción, asegurándose cuidadosamente de que la "clase dirigente" y la "oposición" se unan en el medio, controladas desde la misma fuente.
Presenta disculpas, simplificaciones y fabricación directa como si fueran información clasificada.
Nos da cuenta acerca de la "deficiente inteligencia" y la "falta de estrategia coherente", como si ÉSOS fueran los mayores crímenes de la OTAN en Afganistán.
Los artículos de The Guardian sobre la publicación refuerzan la versión oficial del 9/11, El mismo WaPo asiente a la muerte mitologizada de Osama Bin Laden.
Se trata de hacer cumplir la línea de la clase dirigente, disfrazada de crítica. Los crímenes reales son ignorados, mientras que los más pequeños y simples "errores” [siempre]  bien intencionados", son reconocidos de mala gana.
En ninguna parte se aborda la ilegalidad de la invasión.
Ni una sola vez se acusa a nadie de crímenes de guerra.
Los informes de The Guardian no mencionan la palabra opio, que es suficientemente mala. El Washington Post va aún más allá se atrevió a relatar la lucha del Ejército de USA para "frenar" la difusión del comercio de opio.
Esta es una mentira absoluta. Antes de la invasión de 2001, el comercio de opio había sido prácticamente destruido por los talibanes.


 Los [malvados] talibanes prohibieron la producción de heroína en 2001 (justo antes de la invasión). Y cayó hasta casi nada para fin del año.

 
Desde que USA tomó el control [del país], la producción de heroína en la región ha aumentado casi todos los años. Hoy, Afganistán produce el 90% de la heroína global.
Todo esto, se nos dice, mientras la fuerza militar más poderosa del planeta intenta desesperadamente detenerlos. Los talibanes [una fuerza tercermundista]  hicieron en 6 meses lo que el ejército estadounidense no ha podido hacer en 18 años.
Lo dicen y esperan que lo creamos. Esto no tiene sentido. [Tiene que haber un sentido y es que los talibanes (“los malos”) no comerciaban con opio a nivel internacional, porque su motivación no era el lucro. “Los buenos”, en cambio, ya controlan la producción y el comercio en Colombia y el control de Afganistán les viene a redondear el “business” a escala planetaria].
Todo es tan patético. Un intento débil de limpiar un desastre realizado durante veinte años. Esfuerzos débiles para establecer una narrativa de falsa "controversia" al presentarnos una "opinión alternativa" completamente formada y precocinada, para que todas aquellas personas que se creen anti-élitedirigente puedan atiborrarse de indignación, sin tener que hacer el trabajo difícil. de cancelar sus suscripciones de periódicos o hacer su propia investigación.
Aquí está la verdadera "historia secreta" de la guerra de Afganistán: no fue un fracaso, fue un éxito.[Dice un dicho: "negocio que no deja, dejarlo"; y éste dura ya 18 años].
En cada faceta, en cada frente, Afganistán es exactamente lo que USA [corrección: lo que la élite de USA] necesitaba que fuera.
Dosifican por goteo la sangre de jóvenes estadounidenses, destruyen 100,000 vidas afganas y cosechan las recompensas que siempre tuvieron la intención de cosechar:
1. El conflicto permanente a fuego lento les da una excusa para mantener a miles de militares estadounidenses en un país que limita con Irán, Pakistán y China. (Sin mencionar una gran cantidad de estados ex soviéticos).
2. Mantiene los gastos militares altos y agradables, por lo que los congresistas, ex generales y todos los demás miembros de las juntas directivas de Boeing o Lockheed Martin obtienen grandes bonos cada año.
3. Tienen acceso exclusivo a los elementos de tierras raras y otros metales vitales en las montañas afganas. Litio, el más importante de todos.
4. Tienen el control de la industria mundial del opio. Un engranaje vital en las relaciones de las agencias de inteligencia de USA y el crimen organizado. Es esencialmente revertir el lavado de dinero: convertir los fondos de los contribuyentes en dinero oscuro que se pueda gastar contratando mercenarios, organizando asesinatos, organizando golpes de estado ... o simplemente robándolos.
5. Tienen acceso a todos los jóvenes "radicalizados" que pudieran desear. Una pequeña granja yihadista, donde los "terroristas" puedan ser llamados, entrenados y enviados a combatir guerras delegadas [es decir, por cuenta de la élite globalista] en Siria, o difundir el miedo y el caos en Occidente.
Afganistán es un gran activo para el Imperio. El Estado Profundo de USA ha gastado una fortuna [de los contribuyentes estadounidenses] haciéndolo así [y se requiere que la guerra ni se gane ni se termine; en cualquiera de los dos casos se perdería el pretexto para estar allí]. Al menos podrían ser honestos al respecto.

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