jueves, 25 de mayo de 2023

Un vistazo más cercano a la dirigencia rusa

Gritos y Susurros en las Atalayas Rusas

Por Pepe Escobar                                                              12-May-23

FUENTE: https://strategic-culture.org/news/2023/05/12/cries-and-whispers-along-the-russian-watchtowers/

 

 

 

El texto [en rojo] NO viene en el original y fue agregado por el equipo de traducción].


Recuerden a Putin: “Todavía no comenzamos nada”

"Se oían susurros de un 'poder maligno' en las colas de las lecherías, en los tranvías, en las tiendas, en los apartamentos, en las cocinas, en los trenes de cercanías y de larga distancia, en las estaciones grandes y pequeñas, en las dachas y en las playas. Ni que decir tiene que la gente verdaderamente madura y culta no contaba estas historias sobre la visita de una potencia maligna a la capital. De hecho, incluso se burlaban de ellas e intentaban hacer entrar en razón a quienes las contaban".

Mikhail Bulgakov, The Master and Margarita

 


Citando a Dylan, que podría haber sido un epígono de Bulgakov: "Así que dejemos de hablar en falso ahora/se está haciendo tarde". A estas alturas está bastante claro que el delirio de un acuerdo de "paz" en Ucrania es el último sueño húmedo de los sospechosos habituales "capaces de no llegar a un acuerdo", siempre enganchados a las mentiras y al saqueo mientras manipulan hábilmente a liberales selectos entre la élite rusa.

El objetivo sería apaciguar a Moscú con algunas concesiones, conservando al mismo tiempo, y de manera crucial, Odessa, Nikolaev y Dnipro, y salvaguardando lo que sería el acceso de la OTAN al Mar Negro.

Todo ello mientras se invierte en la rabiosa y resentida Polonia para convertirla en una milicia militar de la UE armada hasta los dientes.

De modo que cualquier "negociación" hacia la "paz" enmascara en realidad un intento de posponer sólo por un tiempo el plan maestro original: desmembrar y destruir Rusia.

En Moscú hay debates muy serios, incluso en los niveles más altos, sobre cómo está posicionada realmente la élite. Pueden identificarse aproximadamente tres grupos: el partido de la Victoria; el partido de la "Paz" que la Victoria describiría como rendición; y los Neutrales/Indecisos.

El de la Victoria incluye sin duda a actores cruciales como Dmitri Medvédev; Igor Sechin, de Rosneft; el ministro de Asuntos Exteriores, Lavrov; Nikolái Patrushev; el jefe del Comité de Investigación de Rusia, Aleksandr Bastrykin; y aún bajo fuego sin duda el ministro de Defensa, Shoigu.

En "Paz" estarían, entre otros, el director de Telegram, Pavel Durov; el empresario multimillonario Andrey Melnichenko; el zar del metal y la minería Alisher Usmanov (nacido en Uzbekistán); y el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov [¡¿?!].

Entre los neutrales e indecisos estarían el Primer Ministro, Mijail Mishustin; el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin; el Jefe de Gabinete de la Oficina Ejecutiva Presidencial, Anton Vaino; el Primer Jefe Adjunto de Gabinete de la Administración Presidencial y zar de los medios de comunicación, Alexey Gromov; el Consejero Delegado de Sberbank, Herman Gref; el Consejero Delegado de Gazprom, Alexey Miller [¡¿?!]; y la manzana de la discordia quizás el jefe del FSB, Alexander Bortnikov [curiosamente no es mencionado en ningún grupo Valery Gerasimov].

Es justo argumentar que el tercer grupo representa a la mayoría de la élite. Esto significa que tienen una gran influencia en todo el curso de la Operación Militar Especial (OME), que ahora se ha convertido en una Operación Antiterrorista (OAT).

 

La niebla de la guerra "contraofensiva

Como era de esperar, estos diferentes puntos de vista rusos en las altas esferas suscitan frenéticas especulaciones entre los Centros de Estudio de USA y la OTAN. Rehenes de su propia excitación, llegan a olvidar lo que cualquiera con un coeficiente intelectual superior a la temperatura ambiente sabe: Kiev atiborrado con 30,000 mdd en armamento de la OTAN puede salir con menos de cero efectos de su tan alabada "contraofensiva". Las fuerzas rusas están más que preparadas, y Ucrania carece del elemento sorpresa.

Los piratas colectivos de Occidente, tras rascarse febrilmente la cabeza, descubrieron finalmente que Kiev necesita una "operación de armas combinadas" para sacar algo de su nuevo diluvio de juguetes de la OTAN.

John Cleese ha señalado cómo la coronación de Carlos El Rey Inútil parecía una escena de los Monty Python. Ahora prueba éste como secuela: el Hegemón ni siquiera puede pagar sus billones de deuda mientras los matones de relaciones públicas de Kiev se quejan de que los 30,000 mdd que han conseguido son una miseria.

En el frente ruso, el indispensable Andrei Martyanov un torbellino de ingenio ha observado cómo la mayoría de los alarmados corresponsales militares rusos simplemente no tienen ni idea de "qué tipo y volumen de información de combate está llegando a los puestos de mando en Moscú, Rostov del Don o a los estados mayores de las formaciones en primera línea".

Subraya que "ningún oficial de nivel operativo serio" hablará siquiera con estos tipos, alegremente descritos como "voenkurva" (más o menos, "prostitutas militares"), y simplemente "no divulgarán ningún tipo de datos operativos que sean altamente clasificados".

Así que, tal y como están las cosas, todo el ruido y la furia sobre la "contraofensiva" están envueltos en una espesa niebla de guerra.

Y eso sólo sirve para echar más leña al fuego de las ilusiones de los Centros de Análisis estadounidenses. La nueva narrativa dominante en el Beltway [el área dentro del anillo periférico de Washington, DC donde se ubican las principales dependencias federales] es que el liderazgo en Moscú está "fragmentado y es impredecible". Y eso puede estar conduciendo a "una derrota convencional de una gran potencia nuclear" cuyo "sistema de mando y control se rompió".

Sí: realmente creen en su propia propaganda tonta (copyright John Cleese). Son el equivalente estadounidense del Ministerio de los Paseos Tontos. Incapaces de analizar por qué y cómo la élite rusa mantiene diferentes puntos de vista sobre el método y el alcance de la OME/OAT, lo mejor que se les ocurre es "proteger Ucrania es una necesidad estratégica, ya que la amenaza rusa aumenta si Moscú gana en Ucrania."

 

Lo que hay detrás del sonido y la furia de Prigozhin

La característica arrogancia/ignorancia estadounidense no borra el hecho de que parece haber una seria lucha de poder entre los siloviki [individuos que trabajan en el ejército, los servicios de seguridad del estado, policía, control de drogas o inmigración]. Yevgeny Prigozhin, un silovik, de hecho denunció a Shoigu y Gerasimov como incompetentes, dando a entender que sólo mantienen sus puestos por lealtad al presidente Putin.

Esto no puede ser más grave. Porque está relacionado con una pregunta clave planteada en varios centros militares educados de Moscú: si Rusia es ampliamente conocida por ser la potencia militar más fuerte del mundo, con los misiles defensivos y ofensivos más avanzados, ¿cómo es que no han dado el do de pecho en el campo de batalla ucraniano?

Una respuesta plausible es que sólo 200,000 miembros del ejército ruso están combatiendo actualmente, y entre 400,000 y 600,000 están esperando en la reserva el ataque a Ucrania. Mientras esperan están en constante entrenamiento; así que la espera juega a favor de Rusia.

Una vez que la famosa "contraofensiva" desaparezca, Ucrania será golpeada con una fuerza masiva. No habrá acuerdo negociado. Sólo rendición incondicional.

Lo que está ocurriendo ahora mismo el drama Prigozhin está subordinado a esta lógica, en paralelo a una operación mediática bastante sofisticada.

Sí, el Ministerio de Defensa (MdD) cometió varios errores graves, así como otras instituciones rusas, desde el inicio del OME. Criticarlos en público, de forma constructiva, es un ejercicio saludable.

Las tácticas de Prigozhin son una joya: manipula un grado de ultraje/indignación pública para presionar a la burocracia del MdeD diciendo esencialmente la verdad [esto es bastante dudoso. Siendo el grupo Wagner una entidad privada, opera en base a utilidades. La extraña denuncia de Prigozhin de que «iban a retirarse por no tener municiones» parecería un simple intento de aumentar la factura sobre lo ya pactado, especialmente porque 1 o 2 días antes las fuerzas rusas habían encontrado un enorme depósito de municiones en Soledar]. Incluso podría llegar a dar nombres: oficiales que abandonan diferentes sectores del frente. En cambio, sus "músicos" Wagner aparecen como verdaderos héroes.

Si el sonido y la furia de Prigozhin serán suficientes para poner a punto la atrincherada burocracia del Ministerio de Defensa es una cuestión abierta. Aun así, la cobertura mediática de todo este drama es esencial; ahora que estos problemas son de dominio público, la gente esperará que el Ministerio de Defensa actúe.

Y, por cierto, éste es el hecho esencial: El Poder Superior (la conexión de San Petersburgo [¿?]) ha permitido a Prigozhin (la cursiva es mía) llegar tan lejos como ha querido. De lo contrario, ya estaría en un modernizado gulag.

Así que las próximas semanas son absolutamente cruciales. Sin duda, Putin y el Consejo de Seguridad saben lo que los demás no saben incluido Prigozhin. Lo más importante es que USA/OTAN empezarán a sentar las bases para que lo que quede de Ucrania, los perros falderos del Báltico, la rabiosa Polonia y algunos otros extras se conviertan en una especie de Fortaleza de Europa del Este enzarzada en una guerra de desgaste contra Rusia que podría durar décadas.

Ese puede ser el argumento definitivo para que Rusia se lance de una vez a la yugular, lo antes posible. De lo contrario, el futuro será sombrío. Bueno, no tan sombrío. Recuerde a Putin: "Aún no hemos empezado nada".

jueves, 18 de mayo de 2023

El que tenga ojos para ver, que vea

Apuestas Altas a Medida que los Días de Impunidad del Tío Sam se Acaban

Por Finian Cunningham                                                                28-Mar-23

FUENTE: https://strategic-culture.org/news/2023/03/28/high-stakes-as-uncle-sam-days-of-impunity-finally-over/

 

 

El texto [en rojo] NO viene en el original y fue agregado por el equipo de traducción. Igualmente lo destacado en amarillo aparece como texto simple en el original].

   El edificio del poder imperial de USA nunca había sido retado… hasta ahora.


Rusia y China están decididas a pedir cuentas a los autores estadounidenses del saabotaje del Nord Stream. Los días del Tío Sam de hecho, décadas de criminalidad gratuita [e impune] han terminado. Va a haber un infierno que pagar cuando la tiranía imperialista de Washington se dé de bruces contra la realidad.

Han transcurrido varias semanas en las que USA y sus lacayos occidentales han estado dando evasivas en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, retorciéndose y resistiéndose a los llamamientos de Moscú y Pekín para que se lleve a cabo una investigación penal internacional sobre el sabotaje de los oleoductos del Mar Báltico que volaron por los aires en septiembre.

Una serie de observadores independientes, como el profesor de economía estadounidense Jeffrey Sachs y el ex analista de la CIA Ray McGovern, han coincidido con el informe de investigación publicado el 8 de febrero por el célebre periodista Seymour Hersh, en el que se afirma que el Presidente de USA Joe Biden y sus altos funcionarios de la Casa Blanca ordenaron al Pentágono acabar con el gasoducto de gas natural que recorre el fondo del mar Báltico desde Rusia hasta Alemania.

Rusia y China están decididas a no dejar que se ignore este asunto vital. Quieren una investigación adecuada, la rendición de cuentas internacional y el enjuiciamiento penal. Moscú y Pekín tienen razón al insistir en ello. La presunción de impunidad de Washington y sus aliados occidentales se ha prolongado durante demasiadas décadas. La responsabilidad recae aquí, y tanto Rusia como China son lo suficientemente fuertes como para garantizar que USA no pueda amenazar, chantajear o manipular para librarse del escrutinio [pero puede seguir haciéndose el occiso y fingir demencia].

El proyecto Nord Stream es una infraestructura civil internacional de gran envergadura, cuya construcción ha costado más de 20,000 mdd durante más de una década. Con 1,200 kilómetros de longitud bajo el mar Báltico, es una impresionante obra de ingeniería que simboliza los beneficios mutuos de la buena vecindad y el comercio cooperativo.

Para USA, volar este gasoducto con el fin de expulsar a Rusia del mercado energético europeo y así poder imponer sus propios suministros de gas, [mucho] más caros, es un acto escandaloso de terrorismo de Estado y criminalidad [y prueba fehaciente del verdadero significado del libre comercio para la élite globalista]. También es potencialmente un acto de guerra contra Rusia y un sabotaje cruel contra supuestos aliados europeos cuyos ciudadanos sufren ahora la miseria económica de unas facturas energéticas al alza. Esta semana, los trabajadores alemanes han paralizado toda la economía debido a las protestas industriales por el hundimiento de las empresas y el insoportable costo de la vida.

Por supuesto, el sabotaje del Nord Stream es una cuestión urgente de justicia básica, de rendición de cuentas por un crimen atroz, así como de reparaciones financieras internacionales masivas. Resulta casi cómico que el autoproclamado protagonista estadounidense del "orden mundial basado en normas" esté aplazando desesperadamente un flagrante incidente de negligencia y caos.

Pero más que la obligación esencial de justicia está el legado de impunidad. Que los autores de un acto terrorista tan gratuito no rindan cuentas sienta un peligroso precedente. De lo contrario, ¿qué impide a los terroristas de Estado repetir actos de sabotaje y belicismo igualmente descarados? [de hecho, es una repetición; no se olvide el 9/11 y el “derrumbe” del Edificio 7, que no fue tocado por ningún avión]. El concepto mismo de derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas queda demolido, no simplemente socavado.

El incidente del Nord Stream abre potencialmente una era de anarquía desenfrenada y bandidaje estatal, por parte de una superpotencia nuclear, USA, que utiliza a sus secuaces occidentales como tapadera [pese a ser de los más afectados, lo que da idea de su sometimiento y la inoperancia de la democracia cuando sus políticos electos no son capaces de defender los intereses de sus propios países]. Los medios de comunicación occidentales, en su renuencia a investigar, también quedan expuestos como nada más que canales de propaganda al servicio de los amos imperiales.

El presente recuerda a la década de 1930, durante la época del expansionismo fascista de la Alemania nazi [¿expansionismo cuando trataba de recuperar territorios perdidos durante la 1GM?] y otras naciones imperialistas, como USA, Gran Bretaña, Francia, Italia, España y Japón, entre otras. La Alemania nazi no fue la única culpable durante esa época anterior de barbarie, a pesar del revisionismo oficial occidental de la historia para absolverse a sí misma [pésima y confusa redacción].

Tras la 2GM, en medio de las cenizas de la destrucción internacional y de hasta 85 millones de muertos, se fundaron las Naciones Unidas y su Carta para consagrar ostensiblemente la máxima de que no se repetiría la anarquía y el terrorismo de Estado de los años treinta.

Esa elevada aspiración fue siempre una patética ilusión. En las décadas posteriores a la 2GM no se detuvo el belicismo imperialista ni los subterfugios llevados a cabo principalmente por USA y sus aliados occidentales, en particular Gran Bretaña [que por cierto ya desde entonces navegaban con bandera de ser “los buenos”, mientras “los malos” eran los nazis]. Qué burla que a USA y Gran Bretaña se les concediera la condición de miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, dado que estas dos potencias canallas han sido en gran medida responsables de innumerables guerras posteriores a 1945 [cabe preguntarse si no fueron en gran medida responsables de las guerras ANTES de 1945, porque la historia la han escrito ellos; o tratar de determinar exactamente cuándo pasaron de ser “los buenos” a ser “los malos”]. Las guerras de [Palestina], Vietnam, [Yugoeslavia], Irak, [Libia, Siria], y Afganistán, que duraron décadas, no son más que los crímenes de guerra más notorios de la "relación especial" angloamericana.

Durante las décadas de la Guerra Fría, la Unión Soviética proporcionó un control limitado a las peores depredaciones de los imperialistas occidentales. La República Popular China no era lo suficientemente fuerte como para actuar como fuerza disuasoria.

Durante aproximadamente dos décadas después de que la Guerra Fría terminara oficialmente en 1991 tras la disolución de la Unión Soviética, los gobernantes estadounidenses percibieron una licencia para el "dominio de espectro completo". Washington se embarcó en un frenesí de guerras interminables que hasta hace poco han prevalecido.

La primera prueba de realidad de [contra] la violencia desenfrenada de los imperialistas estadounidenses y sus secuaces de la OTAN fue la intervención militar de Rusia en Siria a finales de 2015 para poner fin a las maquinaciones occidentales para otra operación de cambio de régimen. Washington y sus cómplices fracasaron en sus nefastos objetivos en Siria, aunque los estadounidenses persisten en ocupar ilegalmente parte del país árabe y robar sus recursos petrolíferos [actividades bastante extrañas para ser “los buenos”].

Ucrania es la plena manifestación del fin de la impunidad para USA.

La Rusia de Vladimir Putin ha recuperado la fuerza militar que perdió con la disolución de la Unión Soviética. En cierto modo, la Rusia actual es aún más formidable gracias al desarrollo de nuevas formas de armamento, como los misiles hipersónicos y las defensas antiaéreas S-500. Además, la economía rusa tiene una base más sólida que la de la Unión Soviética, que dependía excesivamente del militarismo. De ahí que Moscú haya podido resistir el asalto económico que Washington y sus aliados han intentado montar en torno al conflicto de Ucrania.

Igualmente importante es el hecho de que China haya alcanzado el estatus de superpotencia económica y militar. Juntos, Rusia y China representan ahora una fuerza compensatoria invulnerable para USA y sus aliados [vasallos] occidentales.

Durante casi ocho décadas después de la 2GM, USA fue relativamente libre de desbocarse, destrozando el derecho internacional y la soberanía de las naciones, acumulando millones de muertos y aterrorizando al planeta con su tiranía "benigna" y narcisista.

El conflicto de Ucrania, donde Rusia ha dicho "basta ya" a años de agresión de la OTAN liderada por USA, está demostrando que los días de impunidad han terminado por fin para el aspirante a hegemón estadounidense.

Washington ha elevado temerariamente las apuestas en Ucrania a un nivel insostenible. Ha apostado la casa y la granja para subyugar a Rusia para su próximo movimiento imperial insaciable contra China. Pero Moscú y Pekín están desafiando al Tío Sam a que muestre su juego. La responsabilidad termina aquí.

El edificio del poder imperial estadounidense nunca ha sido cuestionado desde su creación. Ahora sí.