jueves, 28 de febrero de 2019

Una Farsa Más


Gran Bretaña se Hunde Más Profundamente en la Crisis del Brexit: Su Población Permanece Muy Distanciada del Establishment Político

Por Leon Tressell                                                                                      29-Ene-19
FUENTE: https://www.globalresearch.ca/britain-lurches-deeper-brexit-crisis-population-remains-deeply-alienated-political-establishment/5666925



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La clase política dirigente británica está experimentando una crisis sin precedentes sobre el problema de salir de la Unión Europea. El gobierno conservador va de una crisis a otra respecto al acuerdo del Brexit mientras los políticos de todos los colores discuten y arguyen a medida que el RU da bandazos hacia un escenario potencialmente devastador de No Acuerdo. Esto ha conducido a una gigantesca desconfianza hacia la clase política entre el público largamente sufriente.
A medida que el reloj avanza hacia la fecha de salida del 29 de marzo, vale la pena recordar cómo se produjo esta crisis en primer lugar. Independientemente de la opción Brexit que tome el RU en el próximo período, no le restará valor al hecho de que existe un gran abismo entre grandes sectores de una población amargamente descontenta y la clase política dirigente que no augura nada bueno para la futura estabilidad de un aliado estadounidense clave.
Una encuesta reciente de 33,000 personas reveló que una mayoría abrumadora sentía que cualquiera que sea la opción de Brexit que se adopte, no abordará las desigualdades rampantes, la alienación política y el desencanto que están detrás de la votación para abandonar la UE en 2016.
En junio de 2016, la votación en el RU para salir de la UE conmocionó a las élites financieras y políticas y provocó una agitación en los mercados bursátiles mundiales. Los medios corporativos estaban llenos de expertos conmocionados que lamentaban la decisión democrática de los británicos por el Brexit. Se culpaba a los votantes del Brexit por todo, desde el aumento del racismo contra las familias inmigrantes hasta el aumento de los peligros de los ataques terroristas.
Los medios corporativos, tanto en Gran Bretaña como a nivel internacional, estaban y todavía están furiosos con el electorado británico por votar por el Brexit. Nunca lo vieron venir y todavía no entienden completamente por qué la gente común votó por el Brexit. Más que esto, todavía no entienden cómo el voto de Brexit revela cuán completamente fuera de contacto están los medios corporativos y las elites político-financieras con los millones de personas de la clase trabajadora que votaron por el Brexit.
Seamos muy claros al respecto: el voto por el Brexit fue una rebelión de la clase obrera contra las élites financieras y políticas de Gran Bretaña que han presidido una redistribución masiva de la riqueza en favor de los súper ricos dejando a una quinta parte de la población en la pobreza. El análisis del voto del referéndum muestra cómo cuanto más pobre era un área, mayor fue el voto para el Brexit.
La clase obrera resistió la presión masiva del campo del Bremain [Britain Remain, equivalente del Brexit, para Permanecer] que incluyó a todos los partidos políticos principales, el Banco de Inglaterra, el CBI, el FMI, el BCE, Obama, el Banco Mundial y los burócratas sindicales.
El voto por el Brexit reveló cuán fuera de contacto está la clase dirigente que aboga por la UE respecto a la clase trabajadora. Millones de personas luchan por sobrevivir con salarios bajos, incesantes recortes de beneficios, contratos de cero horas, bancos de alimentos y viviendas pobres, que ponen a sus familias y sus comunidades en una situación de gran presión. Además de esto, las gentes de la clase trabajadora son las que más sufren los recortes al estado de bienestar y los incesantes recortes a los servicios de los consejos locales.
La gente de la clase trabajadora no es tan estúpida que no puedan ver que la UE es una organización fundamentalmente antidemocrática que no les rinde cuentas. Las negociaciones secretas que tuvieron lugar entre la UE y la administración Obama sobre el TTIP, que los miembros del Parlamento Europeo no tuvieron ninguna voz en contra, demostraron de manera concluyente cómo se trata de una organización dirigida en beneficio de los bancos demasiado grandes para quebrar y de las corporaciones multinacionales.
Ellos pueden ver cómo la antidemocrática UE ha obligado a la gente de Grecia a vivir en austeridad permanente y una pobreza masiva a pesar de un referéndum en el 2015 que rechazó de manera decisiva las medidas de austeridad. El economista favorito de Obama, Paul Krugman, calificó la intervención de la UE en Grecia en ese año como un "golpe de estado".
Los defensores de Bremain en 2016, como Mark Carney (ex-Goldman Sachs [y actual gobernador del Banco de Inglaterra]), luego el primer ministro Cameron (de una familia de banqueros evasora de impuestos) y el canciller George Osborne (hijo de un baronet) advirtieron a la gente de clase trabajadora que el Brexit bajaría sus niveles de vida más que cualquier otro grupo en la sociedad del RU.
Sin embargo, millones de personas no fueron engañadas por las lágrimas de cocodrilo provenientes de los responsables de crear una sociedad masivamente desigual. La flexibilización cuantitativa y la ZIRP [Política de Tasa de Interés Cero, por sus siglas en inglés] han enriquecido fabulosamente a los súper ricos, ya que se han beneficiado de las burbujas masivas en el mercado de valores y en la propiedad. El 10% superior de la sociedad posee el 45% de toda la riqueza con un total de más de 5 billones de libras, mientras que el 50% inferior de la sociedad posee un patético 9% de la riqueza.[como cualquier república bananera].
El gobierno del primer ministro Cameron presidió un salvaje ataque contra los beneficios de asistencia social que llevó a un millón y medio de sanciones de beneficios, dejando a las personas totalmente indigentes y llevando a cientos de personas a cometer suicidio. El ataque a las prestaciones sociales para las personas con discapacidad ha sido tan grave que llevó a la ONU a iniciar una investigación sobre las violaciones a los derechos humanos de las personas con discapacidad. En 2018, la ONU acusó al gobierno del RU de "violaciones sistemáticas" a los derechos de las personas con discapacidad.
Las elites políticas y financieras que defendían que Gran Bretaña debía permanecer en la UE se desconcertaron en cuanto a por qué tanta gente de clase trabajadora apoyó tercamente el Brexit en 2016. Eran y todavía son incapaces de comprender la ira, el dolor y el sufrimiento de millones de personas de clase trabajadora que sienten un desprecio cada vez mayor hacia una élite política y financiera que no comprende sus vidas cotidianas. Más de 13 millones viven en la pobreza (1 de cada 5 de la población), mientras que 15 millones viven en condiciones de vivienda inadecuadas.
Esta ira incipiente ante la realidad cotidiana que los enfrenta tiene pocas salidas en la vida. El referéndum de la UE proporcionó a las personas de la clase trabajadora un medio para poner de relieve el desprecio hacia  la clase dirigente política y financiera que ahora rige un país muy dividido en términos de clase y de geografía. Este sentido de enemistad y desencanto con el establecimiento político solo ha aumentado en los dos años y medio transcurridos desde el referéndum del Brexit.
La votación del Brexit ha llevado a una agitación sin precedentes en los dos principales partidos políticos en Gran Bretaña, en particular el Partido Conservador.
Las elites financieras y políticas sufrieron una gran derrota en la votación del Brexit en 2016. El Partido Conservador es uno de los partidos políticos más antiguos y exitosos de la historia y ha servido bien a la clase dominante británica durante más de doscientos años. Ahora enfrenta una crisis sin precedentes y no puede gobernar de manera efectiva.
Independientemente de la opción Brexit que tome el gobierno conservador durante el próximo período, el RU enfrentará enormes desafíos a medida que la economía mundial continúe desacelerándose y se dirija hacia otra recesión devastadora.
Esto planteará grandes desafíos para la estabilidad del RU, cuya base industrial continúa debilitándose, mientras que su sector de servicios financieros pierde su posición dominante en los mercados de capital europeos debido al Brexit. Una población descontenta puede inspirarse en sus vecinos de chalecos amarillos al otro lado del Canal de la Mancha.

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