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Rabino israelí afirma: «El esperma gentil representa un riesgo de descendencia ‘primitiva’».

FUENTE: Ma’an News Agency- 12-Ene-11

TEL AVIV, Israel (Ma’an) – Una mujer judía nunca debería embarazarse utilizando esperma donado por un hombre no-judío —ni siquiera si fuera la última opción disponible, ha afirmado una autoridad israelí de alto rango en la ley judía.

De acuerdo al rabino Dov Lior del movimiento religioso sionista, un bebé nacido a través de inseminación artificial tendrá los “rasgos genéticos negativos que caracterizan a los no-judíos”, reportó el miércoles a los medios israelíes.

El punto de vista de Lior niega una disposición, ampliamente aceptada por los rabinos, de que el esperma donado por un no-judío es preferible al de un judío anónimo, que pudiera presentar un “riesgo genealógico”, reportó la página noticiosa israelí  Ynet.

Lior, quien se dice abordó el problema durante una conferencia sobre salud femenina celebrada recientemente en el Puah Institute, una clínica de fertilidad, aconsejó a las parejas estériles a adoptar en vez de producir descendencia no-judía.

Un texto religioso declara que “los rasgos de carácter del padre pasan al hijo”, dijo. “Si el padre no es judío, ¿que rasgos de carácter podría tener? ¡Rasgos de crueldad, de barbarie! Esos no son los rasgos que caracterizan al pueblo de Israel”.

Él agregó: “Una persona nacida de padres judíos, aun si no fueron criados conforme a la Torah —hay cosas que son transmitidas en la sangre, es genético... “Si el padre es un gentil, entonces el niño estará privado de esas cosas”.

“Incluso he leído en libros que en ocasiones el crimen, los rasgos difíciles, la amargura —un niño que procede de esos rasgos, no es sorpresa que no tenga las cualidades que caracterizan al pueblo de Israel”, agregó.

Lior también ha dicho que los niños nacidos de madres solteras están más inclinados a la criminalidad.

Las observaciones del rabino vienen a medida que los grupos de derechos [humanos] advierten de una creciente marea de sentimientos anti-palestinos en la sociedad israelí.

En semanas recientes, cerca de 300 rabinos firmaron una carta pidiendo a los judíos se abstengan de rentar o vender propiedades a no-judíos y grupos derechistas han montado manifestaciones advirtiendo contra confraternizar con los palestinos.

La carta de los rabinos atrajo una condena generalizada, incluyendo la del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, pero una encuesta publicada a fines de diciembre mostró que los israelíes están parejamente divididos sobre el problema, según reportó AFP.