PAUL CRAIG ROBERTS Edición de Fin de Semana Abril 20-22, 2012
FUENTE: http://www.counterpunch.org/2012/04/20/unplugging-americans-from-the-matrix/
| Las notas de pie de página NO VIENEN en el original y son del traductor |
Los estadounidenses, británicos y europeos occidentales están acostumbrados a pensar de sí mismos como los representantes de la libertad, la democracia y la moralidad en el mundo. Occidente juzga al resto del mundo como si Occidente fuera Dios y el resto del mundo fueran bárbaros con necesidad de ser castigados, invadidos y ocupa-dos. Como los lectores saben, de tiempo en tiempo me surgen preguntas respecto a la validez de la extrema arrogancia occidental.
Con frecuencia China es un país al que los moralistas de Washington hacen referencia en su arrogancia.
Sin embargo, el “autoritario” gobierno chino es en realidad más sensitivo a su población que el gobierno “electo democráticamente” de USA. Más aun, aunque incompletas en el papel las libertades civiles del pueblo chino, su gobierno no ha declarado que pueda violar impunemente cualquier derecho que los ciudadanos chinos puedan tener[1]. Y no es China la que está operando cárceles de tortura alrededor del globo[2].
Por algún tiempo he tenido en mente una comparación realista de ambos países en lugar de la comparación propagandística standard, pero Ron Unz me ha ganado en la tarea dos veces[3]. Unz brinda una oportunidad para educarse. No se la pierda.
Unz ha hecho un excelente trabajo. Además, astutamente presenta con poca fuerza el caso de China y exagera el caso de USA de manera de no provocar indebidamente a los agita-banderas. Sin embargo, la conclusión es clara. Los chinos están menos amenazados actualmente por sus “élites expoliadoras” que los estadounidenses por sus contrapartes.
Además son las élites expoliadoras de USA no las de China las que están bombardean-do, ocupando o vigilando con aviones-robot, otros países. Como dice el engomado: «Sea amable con USA o llevaremos la democracia a su país».
En cuanto a la administración económica, no hay comparación. Unz reporta que duran-te las pasadas tres décadas China ha logrado la tasa más alta de desarrollo económico de la historia humana. Además, la mayoría del nuevo ingreso ha ido a los bolsillos de los trabajadores chinos, no al 1%[4]. Mientras los ingresos reales medianos estadounidenses han estado estancados durante décadas, los ingresos para los trabajadores chinos se han duplicado cada década durante las últimas tres décadas. Un reciente reporte del Banco Mundial atribuye más del 100% de caída en las tasas globales de pobreza al surgimiento de China.
En la última década la producción industrial china se cuadruplicó. China ahora produce más automóviles que USA y Japón juntos y explica el 85% del incremento en la producción mundial de automóviles en la década pasada.
En 1978 la economía estadounidense era 15 veces más grande que la de China. En los próximos años, se espera que el PIB chino rebase al de USA.
Éste es un excitante material que da asombrosos detalles de cuán deficientemente los estadounidenses están siendo servidos por sus élites.
USA ha fallado porque las élites políticas representan solamente a los intereses especia les poderosos que redactan las leyes del país a cambio del financiamiento de las campañas políticas de los “legisladores”. Para desviar la atención de sus fracasos[5], las élites yankis apuntan los dedos a chivos expiatorios externos. China, por ejemplo, es acusada de manipular su moneda. Como dice Unz, el señalar un chivo expiatorio es una farsa política diseñada para los ignorantes y los ingenuos.
Los economistas estadounidenses, o la mayoría de ellos, se han prostituido tanto que la propaganda se ha convertido en sabiduría. La mayoría de los yankis cree que si China simplemente dejara que el valor de su moneda se elevara más rápidamente en relación al dólar, los achaques económicos de USA llegarían a su fin[6]. Está más allá de la creencia que cualquier economista pudiera pensar que los estadounidenses con ingresos estancados o a la baja estarían mejor con un agudo aumento de los precios de los bienes manufacturados en China, de los cuáles tanto dependen, o que el papel del dólar yanki como moneda de reserva, la principal fuente del poder estadounidense, podría sobrevivir tal manifestación de superioridad económica china.
Los yankis asocian la ilegalidad con los gobiernos que no rinden cuentas y ven como tal al gobierno de China. Sin embargo, Unz señala que es el régimen de Bush/Obama el que ha autodeclarado que no tiene que rendir cuentas ni ante la ley estadounidense ni la internacional.
El traspaso del Acta de Poderes de Guerra y las Convenciones de Ginebra, y el poder afirmado del ejecutivo para encarcelar sin juicio ni cargos o para asesinar a cualquier estadounidense que el ejecutivo piense que pueda ser una “amenaza a la seguridad nacional” son indicativos de un estado policíaco completo disfrazado como democracia que rinde cuentas. En USA las niñitas de 6 años que se porten mal en la escuela pueden ser esposadas, encarceladas y acusadas de crímenes. Ni siquiera Hitler o Stalin llegaron a tanto.
Los estadounidenses han perdido el control del gobierno[7] y los gobiernos que no son controlados por el pueblo no son democracias. En USA hoy, la Seguridad Social, Medicare, las estampillas de comida y la red completa de seguridad social están amenazadas por el vociferante deseo de los beneficios de la guerra por los plutócratas del armamento y las instituciones financieras decididas a que los ciudadanos ordinarios soporten el costo de la incompetencia y fraude de los banksters[8].
La comparación de Unz de cómo el gobierno y los medios chinos han manejado la melamina o el escándalo de la fórmula infantil y cómo el gobierno y los medios en USA han manejado el escándalo Vioxx de Merck es particularmente condenatoria. Fueron los medios controlados de China y su gobierno "que no rinde cuentas" los que castigaron a los malandrines de la fórmula infantil, mientras que la prensa libre de USA y el gobierno “que rinde cuentas” los que permitieron a Merck salir sin castigo.
La conclusión de Unz es que es en USA, no en China, donde la vida es considerada como barata.
Ron Unz es un héroe yanki, y uno muy valiente.
Es un acto aun más valiente cuando nadie quiere oír la verdad. Como Frantz Fanon dijo: “A veces la gente mantiene una creencia esencial que es muy fuerte. Cuando se les presenta la evidencia contra esa creencia, la nueva evidencia no puede ser acepta-da. Crearía un sentimiento que es extremadamente incómodo, llamado disonancia cognitiva. Y dado que es tan importante proteger la creencia esencial, racionalizarán, ignorarán e incluso negarán cualquier cosa que no se ajuste a la creencia esencial”.
O como se le explica a Neo en la película, “La Matrix es un sistema, Neo. Ese sistema es nuestro enemigo. Pero cuando tú estás dentro, miras alrededor, ¿qué ves? Hombres de negocios, maestros, abogados, carpinteros. Las mentes mismas de la gente que es-tamos tratando de salvar. Pero hasta que lo hagamos, estas gentes aun son parte de ese sistema, y eso las hace nuestro enemigo. Tienes que entender, la mayoría de esas gentes no están listas para ser desconectadas. Y muchos de ellos están tan habituados, tan completamente dependientes del sistema, que lucharán para protegerlo”.
La mayoría de la gente que conozco personalmente no están dispuestos a ser desconectados. Supongo que mis lectores lo están, como para pescar la oportunidad de des-conectarse más aun y leer la comparación de Ron Unz de USA y China[9].
Luego haga lo que pueda para desconectar a otros.
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PAUL CRAIG ROBERTS fue editor del Wall Street Journal y Srío. asistente del Tesoro Estadounidense. Su libro más reciente, «Cómo se Perdió la Economía», acaba de ser publicado por CounterPunch/AK Press.
[1] Lo mismo puede afirmarse del gobierno de Irán y de Siria e igualmente podía haber sido dicho del régimen de Qaddafi, cuyo pecado fue no estar endeudado con la banca internacional.
[2] Por cierto, tampoco Irán ni Siria tienen ese tipo de cárceles.
[3] Las multinacionales que están explotando la mano de obra china no solamente se les adelantaron al autor y a Ron Unz en esa comparación “realista”; incluso ya están sacando provecho de ella. Lo único que no cuadra en el esquema que presenta el autor es que ese régimen yanki al que acusa, NO es un poder independiente frente a esas mismas multinacio-nales que están en China. ¿Entonces?
No cabe ingenuidad en el autor; parecería más bien un intento de desinformar, negándose a mostrar el cuadro completo.
[4] Really? Parece un intento de crear un mito genial. Nadie se pone a pensar que todas esas fábricas en China que están inundando los mercados mundiales con productos «Made in China» NO SON de propiedad china, sino de multinacionales estadounidenses y europeas que, en complicidad con el gobierno chino, están explotando, como nunca antes, la mano de obra china. ¿O resulta creíble que empresas de propiedad china produzcan más automóviles que USA y Japón juntos (ver párrafo siguiente en el texto)? Efectivamente ese nuevo ingreso no va al 1%, va al 0.001%.
Por otro lado, hay una ventaja adicional que pasa desapercibida y que el autor ni siquie ra menciona. Aunque efectivamente, la mano de obra china es barata (incluso MUY barata para los estándares gringos y europeos), la verdadera ganancia está en que EN EL RESTO DEL MUNDO, los sueldos NO HAN subido como lo habrían hecho, si no se tuviera disponible esa enorme cantidad de mano de obra china.
[5] ¿Le llamas fracaso de las élites al tremendo incremento en la concentración del ingreso que ha habido? Sería más adecuado hablar de fracaso del ciudadano común.
[6] ¿Queriendo crear otro mito genial?. Si se revaluara la moneda china para reducir su superávit comercial anual de 150,000 mdd, las multinacionales extranjeras tendrían que entregar más papelitos impresos (dólares) por la misma cantidad de trabajo (lo que obviamente encarecería los productos hechos allí). Mientras los dirigentes chinos sigan entretenidos juntando papelitos verdes, las multinacionales estarán felices. Ni a éstas ni a los dirigentes chinos les importa lo más mínimo la población china y/o estadounidense.
[7] Esta frase requiere más explicación. Los ciudadanos comunes han perdido el control del gobierno, que se halla en manos de los lobbys y las corporaciones (tanto aquéllos como éstas no son entes abstractos sino dirigidos por personas con nombre y apellido).
[8] Las crisis (y los rescates subsecuentes) no son producto de la incompetencia de los banksters, no son producto de errores o de falla en los cálculos; sino de la ambición sin freno.
[9] El artículo es un esfuerzo no tan sutil de “legitimar” al régimen chino (¿gratuitamente?), cuando en buena parte dicho régimen trabaja codo con codo con LOS MISMOS que el autor critica en USA. Resulta muy revelador que omita referencias a Irán, Siria o a Qaddafi, que tienen en común haberse negado a “colaborar” con esos mismos. Siendo alguien tan experimentado como Paul Craig Roberts, surge la casi certeza de que no es accidental esa omisión.
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